En Alemania da igual si llueve, nieva, hace frío o viento, las
bicicletas son uno de los medios de transporte favoritos. Es difícil
encontrar una calle que no tenga carril bici y también en los cruces los
carriles bici están bien señalizados para que los ciclistas estén mejor
protegidos.
Para los peatones, a revés, no siempre hay paso de cebra…¡que se apuren y tengan cuidado!